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Recomendaciones para ir a la manifestación del 8M, sobre todo, si es la primera vez que asistes

  • Busca convocatorias oficiales y confiables
  • Busca contingentes que den acompañamiento y espacio a las mujeres que van solas
  • Comparte tu ubicación, todo el tiempo, desde que sales de tu casa.
  • Lleva contigo una identificación
  • Lleva zapatos y ropa cómoda (por si tenemos que correr)
  • Conoce la ruta y los horarios
  • Lleva contigo tu celular y asegúrate que tenga batería. De preferencia lleva un cargador portátil.
  • Mantente con un contingente, no vayas sola.
  • Anota el número de tu contacto de emergencia en tu brazo
  • Cubre tus tatuajes o marcas reconocibles
  • Si regresas en transporte público, quítate pañuelos y todo lo representativo de la marcha (por seguridad)
  • Envía foto a tus personas cercanas de cómo vas vestida (por seguridad)
  • No te separes de tu contingente
  • Lleva botiquín de emergencias

Estas son algunas de las recomendaciones que circulan por las redes sociales de diferentes colectivas en México. Parece que, en lugar de ejercer su derecho a manifestarse, las mujeres van a un campo de batalla del que no saben si saldrán vivas o regresarán a casa. Cada año el palacio nacional es blindado con un balla metálica para impedir que las manifestantes ingresen a la explanada del zócalo capitalino, el actual presidente Andrés Manuel López Obrador, ha reiterado un sinfín de veces que su gobierno, es el primer gobierno feminista de la historia. Sin embargo, en los hechos, cada año blinda el palacio y saca a la calle una gran cantidad de policías.

En los últimos años la estrategia ha sido poner en primera fila de represión a policías mujeres, para después decir que ni entre mujeres se respetan, y claro que hubo enfrentamientos, en parte ocasionados por grupos de infiltradas, pero también por parte de las manifestantes.

La valla que protege el palacio nacional es una provocación, estamos hablando que en México importa más un monumento que la vida de las mujeres. Después se culpó a las manifestantes de vandalismo y atentado hacia el patrimonio material. En un país como México en el que hay once feminicidios diarios registrados y no estamos hablando de mujeres adultas, estamos hablando de adolescentes y niñas, mujeres mayores, mujeres de todas las edades; el coraje y la rabia de las mujeres es poca, porque como me dijo una compañera: si un día desaparece una mujer de mi familia ¡Yo lo quemo todo!. Como dijo Yessenia Samudio, una madre a la que le asesinaron a su hija: yo soy una madre a la que me mataron a mi hija, y sí, soy una madre empoderada ¡y feminista! Y estoy que me carga la chingada, tengo todo el derecho a quemar, y a romper, no le voy a pedir permiso a nadie, porque yo estoy rompiendo por mi hija, y la que quiera romper que rompa y la que quiera quemar, que queme ¡y la que no! ¡que no nos estorbe!

En el Estado Mexicano es un peligro ser mujer, recientemente hubo un caso de entre muchos que provoco mucho impacto en una sociedad que a ratos parece indiferente a lo que pasa a las mujeres. Una mujer de 21 años acompañada de su madre fue a denunciar a su pareja, su pareja las siguió hasta la fiscalía y mató a ambas dentro del lugar. Esto sucedió en el Estado de Jalisco y según declaraciones de la fiscalía, no se logró detener al asesino. Pero este caso es solo una más de los muchos que suceden dentro de una sociedad machista que culpa a la mujer de todo el tipo de violencia que un hombre pueda ejercer sobre ella, las mujeres son cuestionadas por salir solas de fiesta, por vestirse con escotes, por salir tarde del trabajo, las mujeres son cuestionadas por no darse a respetar, por provocar a los hombres.

En el metro de la ciudad de México existe un vagón exclusivo para las mujeres, porque es mejor encerrar a las mujeres en un vagón, que castigar a los agresores. Los colegios están cambiando el modelo de uniforme escolar o en su caso están prohibiendo el uso de ciertas prendas, porque es más fácil prohibir a las mujeres que enseñar a los hombres que ser agresor no es genético, que no es que no puedan controlar sus instintos, sino que no lo hacen porque eligen no hacerlo.

Es este ambiente donde las mujeres salen a marchar para reivindicar su derecho a estar, a ser, a vivir y a no ser violentadas por el hecho de ser mujeres. Toda precaución es poca en un Estado donde no se protege a las mujeres.

En México ser feminista es arriesgar la vida, salir y dar el rostro en los medios de comunicación es asegurarte a la desaparición forzada, viajar con un pañuelo morado a verde en el transporte público es motivo para ser agredida. Las mujeres han creado redes de apoyo y de solidaridad para garantizar su seguridad, y hay que decir que las mujeres que van a la marcha son dignas de respeto, hay que ser muy valiente o tener el coraje suficiente para ir a la marcha. O como dicen sus consignas: ¡NOS QUITARON TANTO! ¡QUE NOS QUITARON EL MIEDO!

Cuando hablamos de luchas feministas no hablamos de luchas homogéneas, el feminismo es transversal en todas las facetas, porque no es lo mismo ser mujeres blancas en un país occidental que ser mujeres en un País como México.

Las mujeres en México luchan por vivir, en una sociedad donde hay tantas asesinadas y desparecidas, luchar por derribar el techo de cristal es una lucha de privilegio, porque hay miles de mujeres que han perdido la vida sin saber siquiera que eso existe. Las desigualdades sociales marcan una lucha que ha sido por muchos años dirigida por mujeres que no conocen las realidades que atraviesan las mujeres. Las mujeres indígenas, las mujeres de los barrios y colonias estratificadas, las trabajadoras del hogar, las amas de casa, las mujeres rurales han quedado fuera de las luchas. Pero como me decía Ester Morales, ya hemos despertado, ya no van a hablar por nosotras, ya por fin tenemos el valor de reclamar lo que nos corresponde, desde dentro, desde nuestras tradiciones. Yo, a mí, no me importa ser ama de casa y he tenido muchos hijos, son mi tesoro, eso no me importa, yo no voy a luchar para que las mujeres de mi comunidad dejemos de hacer eso, porque es lo que nos mantiene, nosotras educamos a los hijos. Nosotras lo que queremos luchar es por tener derecho a tener tierras a nuestro nombre, porque los hombres no nos maltraten, porque nuestros hijos tengan derecho a estudiar, porque las parteras sean reconocidas. ¿Lo ves? No luchamos por lo mismo que las del centro, pero también somos mujeres y luchamos por lo nuestro y no somos menos feministas.

No solo las mujeres indígenas se han incorporado a las luchas feministas, las mujeres de barrios y colonias se han sumado a la lucha, son esas mujeres las que llenan las calles, las que arriesgan su vida, las que si tienen que correr o enfrentarse a la policía lo hacen. No son las mujeres blancas académicas privilegiadas las que están al frente de la manifestación. Me dijo Joana: ¡somos nosotras! Las morras las que llenamos las calles, somos nosotras las que ya estamos hasta la madre que nos acosen en la calle, en metro, las que caminamos con miedo de regreso a la casa. Nosotras no tenemos para un pinche Uber. Estamos que nos lleva la chingada porque no hacen nada para detener esto. Nosotras vamos a hacer arder México hasta que dejen de desaparecer a las morras. Nosotras no sabemos de feminismo en los libros, nosotras nos formamos en la pinche calle intentando sobrevivir todos los días, todos los días cuando sales de tu casa no sabes si vas a regresar. Ya desaparecieron a mi hermana, ya desparecieron a mi vecina ¡no tengo miedo! ¡Tengo coraje!

No existe un solo Estado dentro de la República Mexicana que no tenga unos índices altos de feminicidio, desapariciones forzadas, secuestros, violaciones, acoso y todas las formas de violencia hacia las mujeres. En todo el Estado mexicano no hay un solo lugar que sea seguro para las mujeres, no se escapan de esta violencia ni las comunidades más apartadas, en los últimos años también las mujeres de las comunidades han sido violentadas, desparecidas, asesinadas por personas externas a las comunidades, aparte de sufrir la violencia que se solapa bajo los usos y costumbres. La religión es una aliada de la violencia hacia las mujeres, religiones lideradas por pastores y curas machistas, violadores, misóginos, que ejercen el poder que les da esconderse tras una religión.

Quiero terminar diciendo, que esta no es una investigación antropológica, esta es una forma de reivindicar y de apoyar a mis hermanas mexicanas. Está escrito desde el coraje de haber perdido a amigas, desde la rabia de ver crecer a mis sobrinas con miedo, desde el dolor de ver violentadas a mis amigas a diario. Está escrito desde mi migración forzada, desde mi privilegio de poder salir hoy a manifestarme en Madrid sabiendo que voy a regresar a casa, sabiendo que no tengo que ocultar que soy feminista.

¡COMPAÑERAS!  ¡EL PATRIARCADO QUIERE FUEGO!

                                                                                                                             Aracely S. Cruz

Aracely S. Cruz

 

Referencias

LA QUE NO QUIERA QUEMAR TODO, QUE NO NOS ESTORBE – YouTube

Marcha Feminista Mas Grande En Mexico – Bing images

Marcha Feminista Mas Grande En Mexico – Bing images

Marcha Feminista Mas Grande En Mexico valla – Bing images

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