LA EXTREMA DERECHA GANA ELECCIONES EN LAS REDES SOCIALES

Las noticias falsas, o “fake news”, se han convertido en una herramienta poderosa en la política moderna. Estas noticias, que a menudo se difunden a través de las redes sociales, pueden influir significativamente en la opinión pública y, en última instancia, en los resultados electorales. La derecha política ha sido acusada, entiendo que justamente, en varias ocasiones de utilizar estas tácticas para ganar elecciones.

Las noticias falsas se propagan rápidamente en las redes sociales debido a su naturaleza sensacionalista. Un estudio de la organización Avaaz encontró que las noticias falsas y los mensajes de odio de extrema derecha recibieron aproximadamente 500 millones de visitas antes de las elecciones de la UE. Estas noticias suelen ser diseñadas para provocar una respuesta emocional fuerte, lo que aumenta su difusión.

En los últimos años, hemos sido testigos de un auge de la extrema derecha en varios países, y su éxito en las elecciones no se debe únicamente a sus políticas o liderazgo supuestamente carismático. Las redes sociales y la desinformación han desempeñado un papel crucial en su ascenso al poder. A continuación, exploraremos cómo la extrema derecha utiliza las fake news para ganar elecciones, con ejemplos concretos de países donde han tenido éxito:

España: Elecciones Generales de 2023. Días antes de las elecciones generales en España, se difundieron afirmaciones engañosas sobre el voto por correo y el fraude electoral en las redes sociales. Estas acusaciones, amplificadas por los partidarios del Partido Popular y del partido de extrema derecha Vox, guardan similitudes con las afirmaciones infundadas de Donald Trump antes de su derrota en las elecciones estadounidenses de 2020. Aunque las encuestas favorecían al Partido Popular, necesitaba el apoyo de Vox para formar una mayoría de gobierno. La desinformación sobre el voto por correo y el fraude electoral contribuyó a la polarización y al éxito de la derecha populista.

Unión Europea: Elecciones Europeas de 2024: En las redes sociales, se difundieron bulos que deslegitimaban a la Unión Europea. Algunos afirmaban que la UE era antidemocrática y que los ciudadanos no tenían capacidad para elegir a sus dirigentes. Sin embargo, esto es falso. Aunque los líderes de las instituciones comunitarias no se eligen directamente por votación ciudadana, el sistema de designación tiene un funcionamiento democrático. La desinformación afectó la percepción de la UE y contribuyó a la polarización política.

Francia: Marine Le Pen y TikTok: En la plataforma TikTok, supuestas sobrinas de la populista de derecha francesa Marine Le Pen promocionaron a su partido “Rassemblement National” (RN) mediante deepfakes. La publicidad electoral se volvió atractiva y viral, aunque fuera falsa.

Elecciones en Estados Unidos 2016: La campaña de Donald Trump fue acusada de beneficiarse de una gran cantidad de noticias falsas que circulaban en las redes sociales. Estas noticias a menudo atacaban a su oponente, Hillary Clinton, y promovían teorías de conspiración sin fundamento.

México, Elecciones Presidenciales 2018: Durante estas elecciones, se difundieron varias noticias falsas, como la afirmación de que Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, apoyaba a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), o que la esposa de AMLO tenía ancestros nazis.

Argentina, Elecciones Presidenciales 2023: Tras las elecciones, circularon noticias falsas que involucraban a los candidatos Sergio Massa y Javier Milei, así como al astro del fútbol Lionel Messi. Estas noticias buscaban influir en la percepción pública de los candidatos.-

Las noticias falsas, que suele utilizar la extrema derecha en su beneficio, están concebidas para provocar desinformación. Esta crea divisiones, socava la confianza en las instituciones y puede inclinar la balanza en elecciones altamente disputadas, y pueden influir en las elecciones de varias maneras:

Desinformación: Proporcionan información incorrecta o engañosa que puede cambiar la percepción de los votantes sobre un candidato o partido.

Polarización: Aumentan la división entre diferentes grupos políticos, lo que puede movilizar a la base de votantes de un partido.

Deslegitimación: Ponen en duda la legitimidad del proceso electoral, lo que puede desmotivar a los votantes de participar.

Impacto en la Democracia: El uso de noticias falsas para influir en las elecciones plantea serias amenazas a la democracia. La desinformación puede llevar a la elección de candidatos que no representan los verdaderos intereses de la mayoría de los votantes. Además, la polarización y la deslegitimación del proceso electoral pueden erosionar la confianza en las instituciones democráticas.

A ello se le pueden sumar las llamadas teorías de la conspiración que han jugado un papel significativo en varias elecciones en todo el mundo. Estas teorías suelen ser utilizadas para manipular la opinión pública, deslegitimar a los oponentes políticos y sembrar desconfianza en el proceso electoral.

Podemos recordar algunos ejemplos de teorías de la conspiración.

Estados Unidos, Elecciones Presidenciales 2020: Una de las teorías de conspiración más prominentes fue la afirmación de que las elecciones fueron “amañadas” o “robadas” a favor de Joe Biden. Esta teoría fue promovida por Donald Trump y sus seguidores, a pesar de que múltiples investigaciones y recuentos no encontraron evidencia de fraude electoral generalizado. Esta narrativa culminó en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando una multitud intentó interrumpir la certificación de los resultados electorales.

España, Elecciones Generales 2019 y 2023: En España, se han difundido teorías de conspiración sobre pactos ocultos entre partidos políticos. Por ejemplo, se acusó al PSOE y a los independentistas de tener un pacto secreto, a pesar de la falta de evidencia.

Las teorías de conspiración pueden tener los mismos efectos negativos que las fake news, recordemos que tienen la misma finalidad de desinformar, polarizar y deslegitimar al adversario.

Combatir las teorías de conspiración y las fake news requiere un enfoque multifacético:

Educación Mediática: Enseñar a los ciudadanos a identificar y cuestionar la desinformación.

Transparencia: Asegurar que los procesos electorales sean transparentes y accesibles para el escrutinio público.

Responsabilidad de las Plataformas: Las redes sociales y otras plataformas deberían tomar medidas para limitar la difusión de desinformación.

La extrema derecha, pues, ha aprendido a utilizar las redes sociales, las teorías de la conspiración y las fake news para su beneficio. Como ciudadanos informados, debemos ser críticos y buscar fuentes confiables para contrarrestar la propagación de bulos y mentiras en línea. Las fake news y la desinformación han estado en el centro de atención durante las elecciones en todo el mundo. Aunque es difícil cambiar las opiniones políticas de las personas, la desinformación puede influir en su comportamiento y afectar la confianza en las instituciones democráticas

La desinformación no siempre cambia las opiniones políticas, pero puede confundir a las personas sobre cuándo y dónde votar, o incluso si deberían hacerlo. La simple creencia de que la desinformación es influyente puede erosionar la confianza en sistemas robustos, como la ciencia, la atención médica y las elecciones justas.

En concreto uno de los argumentos más utilizados por la extrema derecha son las fake news con contenido racista que tienen un impacto profundo en las elecciones, al exacerbar las divisiones sociales de que antes hemos hablado creando un “nosotros contra ellos”, lo cual moviliza al electorado que se siente amenazado por la diversidad. Incluso los candidatos que promueven la inclusión y la diversidad pueden ser blanco de campañas de desinformación que buscan desacreditarlos. Esto puede afectar su capacidad para ganar apoyo y, en última instancia, influir en los resultados electorales.

Ejemplos y Estrategias:

Alemania: El partido Alternativa para Alemania (AfD) ha utilizado un discurso antiinmigración y xenófobo para ganar apoyo. En las recientes elecciones regionales en Turingia y Sajonia, la AfD logró un notable crecimiento, convirtiéndose en el primer partido de extrema derecha en ganar unas elecciones estatales en Alemania desde la época nazi. Su retórica se centra en la amenaza percibida de la inmigración y la pérdida de identidad cultural, lo que resuena con ciertos segmentos de la población.

Francia: El partido Agrupación Nacional, liderado por Marine Le Pen, ha utilizado consistentemente un discurso antiinmigración y nacionalista. En las elecciones europeas de 2024, la extrema derecha francesa obtuvo un número significativo de escaños, consolidando su posición en el Parlamento Europeo. La retórica de Le Pen se enfoca en la seguridad, la identidad nacional y la oposición a la inmigración masiva.

Y en España, el clarísimo ejemplo de Alvise Pérez,  un conocido activista de extrema derecha que ha ganado notoriedad por su discurso racista y xenófobo. En las elecciones al Parlamento Europeo de 2024, su movimiento “Se acabó la fiesta” logró obtener tres escaños, sorprendiendo a muchos analistas políticos.

Y podríamos seguir describiendo ejemplos, pero no se trata de cansar al lector.

En Europa, se están implementando varias medidas para regular las redes sociales y garantizar un entorno digital más seguro y justo. Las dos principales leyes que abordan esta regulación son la Ley de Servicios Digitales (Digital Services Act, DSA) y la Ley de Mercados Digitales (Digital Markets Act, DMA).

La DSA establece un conjunto de normas para mejorar la seguridad y la transparencia en las plataformas en línea. Algunas de las medidas clave incluyen, lucha contra los contenidos ilícitos, transparencia de los algoritmos, protección de los derechos fundamentales y trazabilidad de los vendedores: En los mercados en línea, se deben implementar medidas para rastrear a los vendedores de bienes o servicios ilícitos.

La DMA se centra en regular las actividades de las grandes plataformas digitales, conocidas como “guardianes de acceso”.

Si bien todas estas normas pueden ayudar a un mejor tráfico informativo, creo, modestamente, que la mejor forma de enfrentarse a la extrema derecha, sus bulos y sus resultados electorales es con información y utilizando el voto con inteligencia, no votando con las vísceras y yendo más allá de nuestras propias narices para mirar hacia el futuro aprendiendo, un poquito, muy poquito, de la historia.

Conxi Far