“Entre Cerros, ofrendas e Incienso” TUMILCO

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Ubicación geográfica

Tumilco es un núcleo poblacional con un sistema ejidal y se localiza al sur del municipio de Tuxpan en el estado de Veracruz México, cuenta con 69 habitantes en treinta viviendas y en el mapa geográfico nacional aparece como Cerro de Tumilco; sus colindancias son con las comunidades de Tabuco, Países Bajos y Benito Juárez, con una ubicación geográfica de latitud 20°54” a 20°56” y longitud 97°21” a 97°18” (1). Una comunidad rural ubicada a escasos kilómetros de las costas del Golfo de México y del rio Tuxpan. Sus habitantes son mestizos y no hablan lengua originaria, aunque se encuentra en una zona nuclear en la Huasteca Baja, cuenta con asentamientos con evidencia arqueológica la cual ya está siendo estudiada por investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). El camino para llegar a Tumilco es por un libramiento de concreto hidráulico que viene de la ciudad de Tuxpan hasta Congregación La Victoria, de ahí tomar la desviación de carretera a la comunidad de Cobos y luego seguir por una brecha de terracería en la ribera del Estero de Tumilco hasta llegar a la comunidad de los inciensos.

Tumilco cuenta con pastizales, tulares, manglares, encinares tropicales entre otros. Por su ubicación en medio de la naturaleza es admirable observar sus abundantes humedales que da lugar a pantanos y un estero que lleva el mismo nombre, su hábitat tiene una extraordinaria biodiversidad, entre lo que encontramos infinidad de especies terrestres y acuáticas, una admirable flora y fauna propia del lugar; por eso fue que antiguamente los Teenek lo eligieron como un lugar para su establecimiento, llegaron y se quedaron.

 

Historia

Tumilco es una comunidad mestiza, pero con un patrón cultural Teenek; podríamos asegurar que esta zona es el centro de lo que represento esa gran metrópolis entre lo que fue Tabuco y Cuatro Ciénegas. Tumilco viene de la lengua Teenek: Tan es Lugar e Ikoó es Incienso por lo que significa “El lugar de los inciensos” dado a los bosques con árboles de copal que existían y donde aún hay evidencia de algunos de ellos. Por su importancia cultural es aquí donde se encuentra la frontera de nuestra Huasteca con el Totonacapan. Tumilco abre la puerta a ese fascinante mundo de lo que es la Huasteca Baja en nuestro Veracruz. En tiempos antiguos por el significado del nombre que tiene Tumilco es muy probable que de aquí se llevaba al centro ceremonial Tabuco (Lugar de Siete), esa resina extraída del árbol de copal, que al ser quemada en sahumerios produce un incienso con agradable olor.

Tumilco se encuentra a escasos kilómetros de lo que fue el Tabuco ceremonial que también fue centro urbanístico, estos dos lugares dan referencia a esa leyenda sobre la Serpiente Voladora de Siete Colores (Pijchal o Arcoíris), muy venerada por los huastecos y que como ofrenda tiene un baile ceremonial. Tanto Tabuco como Tumilco fueron dos de las siete poblaciones que custodiaban al rio Tuxpan que simbolizo a esa gran serpiente.

Con excelentes áreas de pastizales para la ganadería, tierras fértiles para los cultivos básicos y a decir de los lugareños, en Tumilco hace pocos años dejaron de trabajar el sistema de milpas donde obtenían variedad de frutas, así como maíz, frijol, chile, calabaza, pipián (una variedad de calabaza) yuca, mesis (planta con un fierte sabor y olor), cilantro y otros. También por un tiempo se cultivó algodón y tabaco. Se recuerda a Tumilco por esa gran cantidad de bosques de árboles de chicozapote, copales y chijoles que había.

Hay un recuerdo vivo en la memoria de los lugareños de Tumilco sobre una guerra que se dio en la Huasteca allá por el año de 1917, cuando las tropas de Manuel Peláez que estaban en Temapache se desplazaron a Tamiahua al mando de Francisco Rabatte para atacar al pueblo y quemarlo, pero Rabatte que era de ese municipio mando antes una carta a toda la población y sus comunidades para que se salieran y fue así como familias enteras huyeron hacia el norte y al sur pues no era la primera vez que la Plaza de esta Villa había sido atacada. Tamiahua seria defendida por el revolucionario Agustín Galindo. En este devenir histórico se fundaron en la franja de Cabo Rojo allá en la ribera de la Laguna de Tamiahua (2) gran parte de las comunidades y otras nuevas surgieron por el sur de Tuxpan, fue en este año que llegaron familias del municipio de Tamiahua a Tumilco provenientes de Moralillo y El Mesón. Por segunda vez esta tierra bendita nuevamente da cobijo a los nuevos habitantes que se quedaron a vivir aquí para siempre.

El sistema productivo de Tumilco detona en los años cuarenta cuando estaba en proceso la segunda guerra mundial y dado a que en este lugar existían zonas boscosas de chicozapote, se dio su explotación chiclera. La historia menciona que la Huasteca exportaba chicle a empresas estadunidenses que lo requerían para ser enviados a sus soldados combatientes en la guerra. Esta actividad productiva mucho vino ayudar en la economía de las familias de Tumilco. Aún podemos ver algunos árboles con cicatrices en sus cortezas de lo que fue esta actividad comercial. Las historias de relatos en esta comunidad también mencionan que además de la producción de chicle se daba la producción carbonífera que se obtenía de troncos secos de árboles de chicozapote solo que este carbón era llevado a Tuxpan al igual que el plátano roatán que en ese entonces era llamado el oro verde, todo transportado vía marítima por el estero para su comercialización. Tumilco estaba muy alejado de la urbanización y aún se recuerdan los juegos de niños y jóvenes donde se hacían pelotas con resina de chicle y se forraban con hilos de pabilos para que rebotaran en el suelo (3).

Vemos como la comunidad de Tumilco está marcada por dos hechos históricos sorprendentes: una por su patrón cultural que es el Teenek y la otra por una historia más contemporánea en una migración por la guerra de la revolución mexicana que se dio a principios del siglo XX.

Ofrendas e incienso

Los arboles de copal dan una resina que fue de gran uso desde el periodo preclásico y tuvo un impacto productivo en toda esta área de Mesoamérica con un valor representativo en la religiosidad que es la purificación. Los huastecos quemaban la resina del copal en las brasas y el humo que brotaba con ese olor agradable se sahumaban los cuerpos ya sea vivos o muertos y así su alma era llevada hasta el cielo; este humo era la conexión entre lo divino con lo terrestre, quien era sahumado recibía purificación se le quitaban todos esos males que le aquejaban estando en la tierra y esto les permitía pasar al cielo o a ese mundo celeste. El incienso o humo del copal para los huastecos, además de purificar el alma de los vivos y los muertos, también purifica el entorno natural de las personas, en algunas comunidades al sahumar se hacen ritos ceremoniales para las purificaciones completas y que son acompañados con ofrendas.

Las ofrendas tanto en la antigüedad como en la época actual representan una forma de bondad y agradecimiento. Estas se efectúan por medio de rituales donde se convoca a alguna deidad, a personas, a la naturaleza o a los astros. La ofrenda consiste en ofrecer alimentos, cantos, bailes y música purificados con sahumerios e incluso hasta los utensilios domésticos o accesorios personales sin importar las jerarquías deben estar purificados para todo tipo de ritual.

Dado a la fusión multicultural por la llegada de grupos externos como europeos, afros o asiáticos, en la Huasteca se ha conformado una idiosincrasia con estas fusiones en donde las ofrendas se les ha agregado elementos no propios que van desde las flores, las velas y sahumerios con inciensos diversos y se ha ido perdiendo el uso de la resina del árbol del copal.

El cerro del Farallon

En la Huasteca Baja eran los Pascoles los guías o sabios espirituales que vivían en edificios ubicados en los cerros más altos, desde ahí ordenaban el sistema de gobierno de sus pueblos. Tenían ellos el conocimiento respecto a los movimientos de los astros y el manejo de la naturaleza para poder llevar a cabo las siembras en los ciclos exactos y así obtener buenas cosechas. Tenían un calendario agrícola que marcaba los periodos de los tonanmiles (tiempos de la siembra) y además determinaba sus ciclos de vida y muerte. Estos ciclos forman esa calendarización agrícola que hasta hoy día existe. La naturaleza como cuerpo vivo siempre ha estado ligada a las divinidades como Quicha nuestro Sol y Anam nuestra Tierra. Para los huastecos los cues o los chenes (cerros) eran la fuente de vida ya que agrupados y elevados daban manantiales formando zanjas, arroyos, ríos, esteros, lagos, lagunas hasta formar los grandes mares. Los cerros son los dadores de vida por el agua que brindan y son considerados como el obsequio de nuestra naturaleza a la humanidad es por eso que a sus manantiales antiguamente se les daba ofrenda.

Ahora bien, Tuxpan comenzó a destacar en comercio y poder desde su establecimiento como puerto desde 1826 por su ubicación costera en el Golfo de México y el contar con un rio navegable que daba lugar a una fuerte movilización comercial (4), se establecen muelles, patios portuarios y faros dentro y fuera del mar. Siempre han existido serranías tanto en la ciudad como en gran parte del territorio municipal, tanto es así que cuando pasaron por aquí los españoles en 1522 estos cerros fueron visibles a grandes distancias y les llamaron las Sierras de Tuspa (5).

En Tumilco se encuentran una cantidad de cerros, uno en especial se llama el Cerro del Copal que se encuentra cerca de las llamadas Peñas, pero hay otros cerros más hacia el sur, existe uno de mucha relevancia para la comunidad y es llamado Cerro del Farallón. Cuando los españoles comenzaron a acomodar sus estancias fue en este cerro en el siglo XVIII al que tuvieron muy activo ubicando en él un faro, por eso el cerro recibe este nombre Farallón. Este faro fue guía para la navegación de las embarcaciones marítimas españolas.

En la actualidad el Cerro del Farallón es usado como observatorio por tener una altitud aproximada a los 18 metros, llegar a la cima puede ser a caballo o a pie y ya estando ahí se recibe esa brisa marina que llega desde las costas del mar; es usado también como observatorio natural hacia los horizontes de los verdosos manglares y esteros. Un lugar perfecto para acudir solos o en compañía para liberar las energías negativas. Toda persona que sube al Cerro del Farallón puede llegar a experimentar esa sensación de sanación física, mental y espiritual.

Los huastecos reciben el primer ciclo agrícola entre el 19 al 24 de marzo, así marca su calendarización con siembras y cosechas, es decir es la llegada de Pijchal que es la misma Serpiente Quetzalcóatl o Kukulcán. Para la astronomía es en estas fechas en cuando se da un fenómeno natural, cuando el movimiento de la tierra cambia la inclinación y este 2019 fue exactamente a las 15:58 horas del día 20 de marzo, es decir los días duran igual que las noches por eso se le conoce como el “equinoccio” o iguales (6), El Cerro del Farallón en Tumilco marca un día perfecto para observar el punto máximo de Quicha o el Sol en estos dias.

Hist. Gabriel Cruz Reyes

Promotor cultural comunitario en la Huasteca Baja y activista en el Rescate Arqueológico de Tuxpan

Referencias

  • Ramos Ramos Miriam, Tesis para Maestría Caracterización del Hábitat y Abundancia de nueve aves sujetas a protección especial. En el Manglar de Tumilco. Pág. 12. Universidad Veracruzana. Tuxpan Veracruz México 2010
  • Cruz Reyes. Gabriel, Tamiahua: una historia compartida. Edit. Gobierno del estado de Veracruz, Pág. 106. Xalapa Veracruz 1998
  • Relatos y narraciones de historias orales por Salvador Bautista Cruz y José Antonio Ramírez Infante habitantes de la Comunidad Cerro de Tumilco. 13 de marzo del 2019 Tuxpan Veracruz
  • Gómez Cruz, Filiberta Circuitos mercantiles y grupos de poder portuarios Tuxpan y Tampico en la primera mitad del siglo XIX. Editorial Porrúa y Universidad Veracruzana 2012 México DF
  • Díaz del Castillo Bernal, Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España en tres tomos, Primera Edición Océano 1987
  • Entrevista con Jovanny Alarcón Vera. Sociedad Astronómica de Tuxpan Veracruz 13 de marzo del 2019.
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